I-Nuestra creación y otras tonterías…
Cuando hablamos de que no estamos solos, debemos entender que la fuente primaria, que son los Hermanos Mayores y Padres Creadores fieles a los orígenes de Luz de todo cuanto fue creado; una vez que alcanzan el nivel de maduración, se les otorga la extraordinaria labor de presentar propuestas, para convertirse en padres o científicos creadores. Así que cuando reciben la apertura de acceso, comienzan con la labor magna de crear sus propios sistemas solares y por consiguiente, poblarlos con cuantas exuberancias de seres contemplamos y somos, como por ejemplo, lo hay en ésta esfera Tierra. Nosotros, debemos tenerlo presente, ya que somos creación de Ellos. Ellos, Padres y Madres Creadores, son investigadores científicos u obreros del cosmos, que caminan en fiel obediencia a la ley de igualdad, a la ley de vida, a la ley de trabajo…; Ellos son aquellos a quienes llamamos extraterrestres e incluso los tomamos como ‘nuestros dioses’. Ellos nunca nos han mentido, simplemente, en la época que han dado a conocer alguna revelación, su canalizador o mensajero o profeta…, lo ha descrito dentro de la visión y entendimiento de cada época; pero nunca nos han mentido; aquí, entre nosotros, si se han ido tergiversando cada uno de sus mensajes.
Ésta especie humana que venimos ocupando, es el resultado del cuarto prototipo de especie que intentaron, donde reunimos las condiciones adecuadas para que pudiéramos ofrecer unos resultados de desarrollo y elevación como especie, lo más óptimo posible a su postura visionaria como Padres Creadores; así, dentro de lo que pretendían con semejantes creaciones. Los tres intentos anteriores tuvieron que ser ‘eliminados’ por los defectos que iban presentando en sus prototipos de origen; de ahí que cuando se ponía en marcha un nuevo modelo, ya había sido modificado y corregido desde la experimentación con el anterior. Ésto supone una dedicación plena en milenios incontables de estudio e investigación de campo. Ellos no son dioses, como pretenciosamente los tomamos desde nuestra opaca visión; sencillamente son científicos e investigadores, obreros del cosmos, como lo es todo cuanto se viene creando, en continua búsqueda de metas de superación y crecimiento, dentro de los niveles de sabiduría que se van alcanzando.
Como nueva especie que somos cuando culminan con nuestra creación y sabiendo que se encuentran en un planeta de experimentación, donde todos los seres inmateriales que encarnen, vienen por mutuo acuerdo y propia determinación; nuestros Creadores, resuelven que seamos seres con un exclusivo desarrollo del conocimiento y crecimiento espiritual, en el más puro amor tántrico. Ante semejante experimentación, acuerdan unánimemente, que el conocimiento de las tecnologías que ellos habían y tenían desarrolladas hasta el momento, se nos mantuviera totalmente al margen; es decir, se nos tenga vedado plenamente el acceso a cualquier forma de tecnología que ellos poseían como creadores. Ésta es la realidad de la famosa ‘fruta prohibida’ que se nos enseña erróneamente desde diferentes corrientes; la de no tocar ni acceder al conocimiento tecnológico que ellos como creadores tenían asumido; por tanto, será totalmente diferente, la visión y razones de esa nueva especie que crean. Así sucedió; en pocos milenios, los nuevos alumnos, su flamante creación, daba muestras de una extraordinaria elevación que, incluso, se preveía de cómo, en pocas generaciones, lograrían en aventajar a sus propios creadores. ¿Lo creado, podría superar a sus propios Creadores? Así que surgió un recelo entre ellos mismos; una porción considerable de estos padres creadores, no consentía que pudieran ser aventajados por su propia creación, llegando a verdaderos enfrentamientos y a misma traición. Por lo que a espaldas de los creadores que se mantenían fieles al proyecto inicial, dieron a conocer o a ‘probar la fruta prohibida’; es decir, le facilitaron el acceso al conocimiento tecnológico que poseían y que hasta entonces, les tenía plenamente oculto y prohibido; asegurándoles que quien así accediera, llegaría a alcanzar idénticas cotas de crecimiento que esos instigadores padres creadores poseían. Naturalmente que la masa de humanos que participaron de ese conocimiento, se contaminó y comenzó a perder lo innato de la realidad de sus orígenes.
Los Padres Creadores fieles a los principios de semejante proyecto, dieron a conocer tan bárbara traición de sus colegas, a la Confederación de Planetas Inteligentes. De tal manera que se determinó exiliar en la esfera Tierra a todo ese grupo de Padres Creadores traidores a la Luz. Desde ese entonces, los humanos pasamos por situaciones de extremos inconcebibles a manos de éstos ‘dioses’ que nos dominan y utilizan desde su afamado Olimpo. -continuará-